Cuando se menciona el efecto Von Restorff, generalmente se hace referencia a la influencia que tiene el contexto en el que se presenta un objeto, sobre la probabilidad de que ese objeto sea recordado. Según este efecto, los objetos que se presentan en un contexto único o peculiar, son más probables de ser recordados que aquellos que se presentan en un contexto común. Es también conocido como el Efecto de Aislamiento.

Este efecto fue descubierto por la psiquiatra y pediatra alemana Hedwig Von Restorff en 1933, cuando realizó un estudio en el que mostró a un grupo de niños dibujos de cabezas de animales. Algunos de estos dibujos estaban aislados en el papel, mientras que otros estaban rodeados por otros objetos.

Los niños recordaron mejor las cabezas de animales aisladas en el papel, que las cabezas de animales que estaban rodeadas por otros objetos. Aunque el efecto Von Restorff fue descubierto hace más de 80 años, todavía es uno de los fenómenos psicológicos mejor estudiados. Actualmente, se sabe que este efecto se debe a que los objetos únicos o peculiares llaman la atención, lo que hace que sean más probables de ser recordados.

Debido a su capacidad para llamar la atención, el efecto Von Restorff se utiliza a menudo en publicidad y marketing. Por ejemplo, las empresas pueden intentar destacar un producto dentro de una lista de otros productos, o pueden crear anuncios que destaquen el producto en un contexto único.

Además, el efecto Von Restorff también se utiliza en la enseñanza. Por ejemplo, los profesores pueden intentar que los alumnos recuerden una determinada idea, utilizando una presentación visual única. De esta forma, los alumnos estarán más propensos a recordar la idea.